Años 50. Villar del Río es un pequeño y tranquilo pueblo en el que nunca pasa nada. Sin embargo, el mismo día en que llegan la cantante folclórica Carmen Vargas y su representante, se recibe la noticia de la inminente visita de un comité del Plan Marshall (proyecto económico americano para la reconstrucción de Europa). La novedad provoca un gran revuelo entre la gente, y el bonachón alcalde del pueblo (Pepe Isbert) propone a los vecinos que se disfracen al más puro estilo andaluz para causar buena impresión a los americanos que vienen a repartir dinero.