Patrizia, de dieciocho años de edad, después del año escolar en la universidad, regresó a su país siendo acogida por su abuela y redescubrió a sus novias de la infancia. En virtud de su animado carácter, se arregla para sí misma y para sus amigos un salón de baile en un cobertizo propiedad de un notario, quien, decidida a derribar la estructura, pide a las autoridades que desalojen a los jóvenes del edificio. La niña y sus tres novias desinhibidas, educadas por Marilena (una prostituta también llamada "la boloñesa") logran arrinconar al Concejo Municipal seduciendo a sus miembros: el estancista, El fotógrafo y el carnicero. Incluso ayudan a las niñas a documentar las malas acciones del notario traidor y su hermano abogado.